¿Cuántas películas se han hecho en la historia del cine?

Es una pregunta tonta que me hago a veces, y que supongo todo coleccionista compulsivo y/o cinéfilo completista se ha hecho alguna vez.

Parece una pregunta imposible de responder. Qué narices: es imposible de responder. Parece mentira, ¿no? siendo el séptimo arte tan joven relativamente hablando (125 años, más o menos), cabría esperar un recuento más o menos fiable del número de obras que ha producido. Pero lo cierto es que son tantos los países del mundo que ruedan tantísimas películas (todos habéis oído eso de que se hace más cine en Nigeria que en Hollywood, ¿no?), muchas de ellas con unos canales de distribución tan reducidos, que no hay forma humana de seguirles la pista a todas ni de llevar un recuento global fiable. A eso hay que sumarle el abaratamiento de los costes de producción con la llegada del vídeo digital, lo que provoca un aumento exponencial del número de obras que se completan al año en cualquier rincón del globo, ya sea de manos de un puñado de amigotes o una major multimillonaria.

Lo más parecido que tenemos a una lista de todas las películas del mundo es, hoy por hoy, IMDB. La cual, por cierto, discrimina casi por sistema al total de la producción hecha en Nigeria y en la India, los dos países con mayor producción del mundo. Aún sabiendo esto, es interesante entrar en sus estadísticas y comprobar cuántas pelícuas (estrenadas en salas) tiene registradas desde los inicios del cine (1988) hasta las proyectadas para su estreno en 2016: nada menos que 257.018 films. 

Leed la cifra, digeridla. Echad ahora un ojo a vuestra vergonzosa colección de dvds. Mirad la cifra otra vez. Un cuarto de millón de pelis. Imposible verlas todas en una vida. ¿Imposible? Si estimamos la duración media de una película en 100 minutos, una persona que se sentara a ver todas ellas, una detrás de otra, sin tregua, sin dormir y sin parar para ir al baño (comer sí que podría, aunque yo le recomendaría tener a mano algo más que palomitas, so pena de acabar con los morritos como salchichas), acabaría de verlas todas en solo 50 años. Eso, repito, sin contar con las filmografías de los países con escasa o nula distribución internacional y suponiendo, por supuesto, que en esos 50 años no se produjera ni una sola película más, cosa que, a pesar de las predicciones apocalípticas de la SGAE, no parece probable. 

De pronto, mi vida me parece muy, muy corta. Pienso en la cantidad de truños que me he tragado y en las muchísimas obras maestras que aún no he visto y me hecho a temblar. Si recuerdo la infinidad de veces que me tragué "Un loco a domicilio" con trece años sólo porque la tenía grabada en VHS, directamente entro en depresión. Intentaré vencer mi afán completista y ser más selecto con las películas que elija ver a partir de ahora. Coño, ni siquiera he visto "Ciudadano Kane" todavía. Aunque "Megashark Vs Crocosaurus" también tiene que estar bien... ¿no?